Pensando Juntos-Caperucita y el lobo o ¿Quién es quién?

                                          

  ¿Quién es quién en el Bullying?

  

Caperucita y el lobo feroz.

Debo a una frase bella como todas las suyas y profunda, como es su costumbre, de Belén Nasini, la reflexión que les voy a transmitir. Me encuentro investigando el tema acuciante del acoso escolar. Complejo y duro, elude simplificaciones y certezas. Escribiendo el curso virtual sobre Bullying y, al mismo tiempo modulando las charlas que próximamente brindaré a docentes y madres, padres y familias, acerca de cómo pensar abordajes a  esta problemática, la frase de Belén se hilvanó con mi quehacer presente. Esbozo brevemente unas reflexiones para que vayan construyendo las propias.

"Esta noche el lobo viste su traje de abuela. Me vio vestida de rojo a lo lejos. Y sin dilación comenzó su representación. Pero, ten cuidado, lobo. Que así como tú no eres abuela, tampoco yo soy Caperucita."

¿Quién es quién? Enrique Pichòn Riviere, mi maestro, insistía en una advertencia respecto de los grupos. Quienes aprendimos de él y con él, fuimos formados en la concepción pichoniana de que conviene considerar a la estereotipia  como, al mismo tiempo, generadora y reproductora de empobrecimiento grupal y subjetivo, además de relacionarse en ciertos casos, con una patología. En tanto discípulos de Pichón,  estamos enriquecidos por un instrumento conceptual y sobre todo por una mirada, una posibilidad de "observar" algo tan aparentemente inamovible como el Bullying, con una riqueza que enlaza directamente con las líneas poéticas de Belén

 

Enrique Pichón Riviere.

 El anclaje de los participantes en nodos de la red grupal, por sí mismo, solicita -si se tiene claro que en el aula no se trata de individualidades sino de subjetividades que construyen y son construidas por un grupo- una o varias intervenciones. Las mismas, convocan , en el caso del bullying, a docentes y, al menos, a miembros del gabinete, a repensar y reformular la mirada y a buscar nuevas alternativas de operar para abordar la problemática del acoso. Aquello, lo que Pichón llamaba estereotipia, visionariamente, enriquece la perspectiva de que, los posicionamientos subjetivos rígidos desafían a ser repensados, piden ser encarados novedosamente y con decisión, sobre todo cuando, como en las situaciones de Bullying, conllevan y reproducen violencia y padecimiento.  Desde ya el concepto de estereotipia es complejo y solo puede descubrirse su profundidad en relación con otros, provenientes de distintos ángulos de pensamiento, como goce, como emergente, como incompletud, falta y otros. Esta dilucidación se profundizará en los trabajos que, como dije, me absorben hoy. En esta nota dejo planteadas algunas preguntas, para encender la llamita de esa dilucidación.Las Charlas a docentes y madres y el Curso Virtual sobre Bullying en preparación, profundizarán más estos temas.

Preguntas para pensar

En el Bullying ¿quién es quién?

¿Cómo flexibilizar la estereotipia que produce una escena perpetua de victimario y víctima?

¿Cómo la tarea de aprendizaje y enseñar que da sentidos y es el faro de la presencia en el aula se relaciona con la falla, el error, la dificultad que produce la frustración?

¿Cómo interrogar esa certeza de que hay malos y buenos?

¿Quiénes son los participantes y dónde está anclada la estereotipia, únicamente en la escena que engaña al mostrar solo dos actores o también en la mirada de aquellos que los perciben de ese modo?

Veremos, mi promesa conmigo es seguir dilucidando estas y otras preguntas.

Hay más interrogantes cruciales.

Por ahora, agradezco a Belén y reitero su bella y profunda frase.

"Esta noche el lobo viste su traje de abuela. Me vio vestida de rojo a lo lejos. Y sin dilación comenzó su representación. Pero, ten cuidado, lobo. Que así como tú no eres abuela, tampoco yo soy Caperucita."

Saludos. Clara Jasiner.